- Con ello los fieles de esta congregación religiosa, destacaron el crecimiento espiritual, material y social.
La tarde de este sábado 14 de diciembre, más de mil personas de la Iglesia La Luz del Mundo en la region de tierra caliente, sierra costa y parte de tierra fria del estado de Michoacán se reunieron en la Plaza Constituyentes, de esta ciudad para hacer una proclamación pública de sus principios y valores.
En el desarrollo del evento cultural, los participantes desatacaron emotivamente el crecimiento espiritual, material y social que la Iglesia La Luz del Mundo ha experimentado en los últimos cinco años, en los cuáles la totalidad de los asistentes se han involucrado en las diversas áreas de actividad de esta comunidad, procurando el bienestar social.
El ambiente fue de fiesta de principio a fin, el Orfeón monumental de mas de 100 voces tuvo diversas intervenciones, quienes interpretaron temas musicales que hablan de la incursión y desarrollo cultural de los integrantes de esta iglesia, que actualmente tiene presencia en 58 naciones del mundo, con una feligresía de 5 millones de fieles.
De los valores proclamados en la multitudinaria reunión, se hizo énfasis especial en la gratitud, un sentimiento presente en todos los concurrentes. Las expresiones culturales en el evento incluyeron una variedad de interpretaciones musicales, que van de la poesía coral a las reflexiones, la rondalla y otros instrumentos musicales hasta un bello espectáculo de fuegos pirotécnicos.
Al término del evento los participantes reafirmaron su compromiso de seguir trabajando para que continúe la cosecha de frutos que contribuyan a reducir los índices de violencia que impiden el bienestar y la estabilidad social.
Los miembros y ministros de la Iglesia reafirmaron con evidente alegría sus valores, así como su disposición de seguir trabajando en pro de la formación moral, espiritual y material de los hombres y mujeres que reciben el mensaje apostólico, orientado a formar valores que coadyuvan a la formación de buenos cristianos y también buenos ciudadanos.